Richard Branson y el clima laboral en la empresa

Richard Branson es uno de los emprendedores y visionarios más reconocidos a nivel mundial por su empática personalidad, innovadora visión de negocios y la calidad humana que transmite a sus colaboradores. 

Esta semana es noticia -una vez más- por una nueva política que le gustaría a muchas personas, incluyéndome a mí: vacaciones ilimitadas en el momento que quieras. ¿Está loco? No tanto, no ha sido tan innovador tampoco porque la estrategia la copió de Netflix. Analicemos el caso aquí. 


¿Por qué un CEO ofrecería a sus miles de trabajadores la libertad de salir cuando quieran y el tiempo que quieran de vacaciones? Asegurando además que su ausencia no afectará el negocio ni su carrera profesional. 

Cultura organizacional
Las tácticas de clima laboral no se inventan o copian indiscriminadamente, éstas deben estar asentadas en el conocimiento de la organización. Si ésta no tiene un estilo de trabajo por objetivos no podrá nunca ofrecer a sus trabajadores que salgan cuando quieran ya que no tendrán interiorizadas sus responsabilidades y su compromiso con la empresa.  

Propuesta de Valor del Empleado 
El EVP (Employee Value Proposition) le permite al colaborador saber y conocer los beneficios que le ofrece la empresa para que éste distinga y valore aún más su permanencia en esa organización.  

Un colaborador de Virgin sabrá valorar que su empresa le ofrece un beneficio que tal vez ninguna otra empresa le pueda dar. Esto genera grandes motivos para permanecer en la empresa lo cual reduce los índices de rotación empresarial. 

"La libertad y la responsabilidad
pueden ir muy bien de la mano"
Telegraph.co.uk

Insight humano
Detrás de toda acción de clima laboral debe haber (sí, debe haber) siempre un insight humano. Soy de los que creen que las estrategias de clima laboral "populistas"; es decir, aquellas que solo generan emoción pero ningún valor al colaborador, terminan siendo vacías en el tiempo. 

La propuesta de "vacaciones ilimitadas y en el momento que quieras" responde a una idea detrás muy potente: "me gustaría sentir que tengo tiempo para mí también y no solo para trabajar", y es lo que le ofrecen a través de esta táctica.

Pero, ¿no será perjudicial para la empresa?

• No se pierden objetivos: si los colaboradores están comprometidos con la organización, sabrán que ella espera compromiso y metas alcanzadas. Dudo que los colaboradores arriesguen este tremendo beneficio no cumpliendo la promesa del colaborador.
• No se perdería dinero: porque la conciencia de las vacaciones serían proporcionales al compromiso que tiene el colaborador con la empresa. Y sabemos que, mientras más compromiso, mayor efectividad laboral. 
• Se gana confianza: el colaborador siente que la empresa confía en él y siente la "obligación" de retribuirle la confianza con mayor empeño y compromiso.
• Se gana engagement: que el colaborador vea que su empresa es innovadora y atractiva para trabajar le genera mayor compromiso y motivación. Su empresa se vuelve una lovemark. 

¿Qué opinas de esta estrategia?, ¿Crees que tu país está preparado para aplicarla? 

Fuentes:
El Comercio
Forbes