Si vas a Huancaya...

... también tienes que ir a Laraos.

Hace poco visité Huancaya, un distrito de la sierra de Lima a más de 3,500 m.s.n.m. que forma parte de la Reserva Paisajística de Nor Yauyos Cochas. Huancaya es famosa por sus cataratas y lagunas. Sin embargo, me hospedé en un pueblo que se encuentra a una hora de ahí: Laraos. 

Te cuento la travesía y te comparto algunos consejos y recomendaciones de quien ya pasó por esa experiencia y que espero te ayuden en caso estés interesados en ir hacia allá.

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En ruta... 

Salimos un jueves a las 6:00 a.m. desde Lima con auto propio, una camioneta Honda CRV 4x2. El camino fue bastante tranquilo y con algunos pit stops: los pancitos del Tambo, el grifo del boulevard de Asia y un grifo en Lunahuaná. El camino es un 80% asfaltado. Hacia Laraos, todo el camino es pista. Sin embargo, si uno no se desvía hacia Laraos y sigue de frente hacia Huancaya y Vilca, la pista se convierte en una trocha ligera. No recomiendo ir en un auto bajo; si bien la trocha no es exigente y el auto va a llegar, éste se va a maltratar. 

El camino nos tomó 7 horas exactas. Llegar hasta Lunahuaná fue rápido y tranquilo, pero luego las curvas hacen que tu velocidad promedio sea de 20-40 km/h. Este tramo fue el más largo, aprox. 5 hrs pero que pasan rápido por lo bonito del camino. La pista es estrecha y a partir del km 60 se vuelve de una sola vía. El camino te permite ver si vienen carros en sentido contrario más adelante y hay varias extensiones de tierra para que alguno se detenga y deje pasar al otro; pero también hay algunas curvas bien cerradas que se deben pasar con precaución. En tres ocasiones en todo el viaje nos vimos frente a frente con autos que iban a más de 40 km/h. Por eso hay que manejar con cuidado. 

El camino nos tomó 7 horas. 

Combustible

Llenamos el tanque saliendo de Lima y pudimos recorrer el camino hacia Laraos (310 km). Luego de los grifos de Lunahuaná, no van a encontrar ningún otro grifo Primax, Repsol o similar; los grifos serán caseros en el camino sin garantía del combustible, pero es lo único que hay. Nosotros reabastecimos la gasolina en un pueblo llamado Allis, lo suficiente como para volver a Laraos y para que lleguemos a la Panamericana Sur, en donde pudimos completar el tanque. 

Hospedaje

Ciegamente y por recomendación de una amiga, decidimos quedarnos en Laraos, un pueblo a 20 min desde el desvío que parte de la carretera. Laraos tiene un hospedaje turístico, pero nos quedamos en una casa-hospedaje en la que te atendían como si estuvieras en un hostal. Una familia del lugar que está trabajando muy duro para repotenciar y revalorar los atractivos turísticos y culturales del pueblo - la familia Meza, todos muy sencillos pero súper acogedores - ha habilitado en su segundo piso cinco habitaciones que nada tienen que envidiar a una buen hostal pequeño con buena atención. Solo S/ 50 por noche nos incluían también todas las comidas, habitación matrimonial con baño propio, agua caliente (terma recién instalada), toallas limpias, papel higiénico y jabón. Si bien de noche el frío es gélido, la habitación mantenía bastante bien el calor y no sentíamos frío. Además, cuando salíamos hacia los tours, la familia arreglaba la habitación e incluso, cuando nos sentimos un poco mal por la altura, nos llevaron un mate de coca estilo room service. 

Atractivos

• Definitivamente las cataratas y lagunas son espectaculares. Las van a encontrar durante todo el camino de la carretera Cañete. Sin embargo, los mejores lugares para apreciarlas son Vilca y Huancaya. Si les gusta la naturaleza, verlas durante una hora no les será suficiente; recomiendo quedarse ahí al menos un día completo y hacer sin falta el paseo en bote en la Laguna Huallhua. 

• En Laraos encontré otros atractivos distintos, más de aventura tipo trekking, y que me gustaron tanto o más que los otros porque no los esperaba. Realizamos una caminata hacia unas pinturas rupestres increíbles. Para llegar a ellas tuvimos que cruzar por un rebaño de casi 200 ovejas y caminar cerca de un poco de hielo de los nevados para finalmente ver las pinturas al costado de varias vizcachas en su hábitat natural. Además, como el turismo que hicimos fue rural-comunitario, todas las caminatas y paseos estuvieron acompañados de almuerzos rústicos con muchos tipos de papas, queso artesanal, oca, bebidas calientes a base de hierbas de la zona y cancha. También tuvimos diálogos muy cercanos con la gente, especialmente con los miembros de la familia Meza e hicimos una fogata, una pachamanca, y aprendimos cómo se realiza la ceremonia del pago a la tierra. 

Pinturas rupestres

Pinturas rupestres

Pinturas rupestres

En el ingreso a un socavón muy profundo. Han intentado llegar hasta el final pero aún
no lo han logrado. Si te paras en la entrada, puedes sentir cómo la brisa húmeda
te mueve el pelo con fuerza

Aprovechamos en conocer las tradiciones ancestrales
de los pobladores de Laraos. 

Antes de llegar a las pinturas rupestres, nuestro guía nos enseñó cómo se hace un pago a la tierra.

El picnic/almuerzo tradicional con harta papa nativa
cultivada por la misma familia Meza. 

• Luego tuvimos una caminata de dos horas, con casi todos los caminos en bajada. Según dicen, la ruta que seguimos también la recorrió el Virrey La Serna con todo su ejército, y además es un camino preinca. Los paisajes son espectaculares y el camino para los aventureros es súper recomendado. 

Al final de un camino por donde pasó el Virrey La Serna

Hielo en el camino a las pinturas rupestres.

• Laraos está rodeado de una cantidad impresionante (Cusco se queda corto) de andenerías preincaicas que las personas del pueblo están intentando rescatar. Todos los andenes son bañados por agua que baja de las montañas gracias a los acueductos que construyeron los preincas. La gente del pueblo dice, incluso, que si un andén se daña y ellos lo intentan reconstruir, nunca queda igual de fuerte y perfecto que el original.
  
  Por las noches, el cielo es espectacular. Les recomiendo salir del pueblo por la pista durante 5 minutos carro y quedarse a ver el cielo totalmente estrellado. Se logra ver el trazo de la vía láctea y algunas estrellas fugaces. 

Al finalizar nuestro paseo, la familia Meza nos despidió con una Pachamanca en su andén
y nos hizo vestir con la vestimenta típica de Laraos.

Señal telefónica y datos

A partir del km 57, pasando Lunahuaná, la señal de datos de Movistar se perdió por completo. Estuvimos desconectados de Internet todos los días del viaje. Sí tuvimos señal telefónica en todo momento, salvo algunas ocasiones en el camino. La señal de Claro sí llegaba a Laraos, Huancaya y Vilca (pero solo para uso de datos móviles). En ningún caso van a encontrar cabinas de internet o señal wifi con normalidad. Es una buena oportunidad para desconectarte de verdad. 

El ingreso a Laraos. Antes del arco hay una alameda bastante bonita para caminar. 

Balcones típicos del pueblo. 

Presupuesto

Gastamos en total S/ 730, que nos alcanzaron para pagar la estadía de dos personas en habitación matrimonial con baño propio, la alimentación completa durante todos los días, los tours y guías. Solo pagamos un adicional de S/ 30 para el almuerzo del día que visitamos Vilca. Este presupuesto no considera la gasolina. 

Una de las pocas casas típicas con techo de paja que quedan en pie en Laraos.
Muchas viviendas fueron destruidas en el terremoto del 2007.

Laguna Huallhua

Catarata Yuncalara, en las afueras de Laraos. 

En caso tu auto tenga algún desperfecto, puedes contar con una grúa improvisada que te ayude. 

Si necesitas información adicional o contactos en Laraos o Huancaya, puedes escribirme y con gusto te ayudo.