Facebook se ha
convertido en parte de nuestra vida, usamos la aplicación en todo momento y lugar, cuando es necesario y cuando no. Pasamos tanto tiempo en Facebook que no nos hacemos algunas preguntas importantes: ¿lo estamos usando adecuadamente? ¿es tiempo
perdido o bien invertido?, ¿sabemos qué efectos podría tener en nuestros hijos?
Un reciente estudio
indica que mientras más usas Facebook, peor te sientes la siguiente ves que te
conectas. Esto no aplica automáticamente para todas las personas, depende del uso que le den, el nivel de madurez y el temperamento o personalidad de la persona. Pero sí es un hecho que un mal manejo de las redes sociales puede causar depresión en
adolescentes.
Esto tal vez por una
impresión errada de los demás pensando que son más felices que uno mismo por
las publicaciones que hacen, cantidad de likes o amigos que tienen. No es muy difícil de imaginar esto, teniendo en cuenta que los niños y adolescentes no procesan la realidad de una manera completa e íntegra y muchas veces asimilar sus experiencias de maneras muy diversas que para sus mismos padres es difícil de entender.
Este incremento de depresión
adolescente relacionado con el uso de la tecnología, se diferencia en dos tipos
de uso: el consumo pasivo o la interacción activa.
El consumo pasivo quiere decir que puedo solo ser observador
de lo que sucede en el mundo y hacerme una idea, muchas veces equivocada de él. Por otro lado, la interacción activa, me permite interactuar con mis contactos y esto permitirme eliminar los filtros o subjetivismos que haya podido adquirir. Nunca la observación simple nos permitirá tener un panorama amplio y cercano a la realidad de lo que ocurre.
Las redes sociales
están para acercarnos y si bien no es la solución, si las personas tienen
constante interacción con otras, aunque sea en redes sociales, tienden a tener
una mejor experiencia emocional al final del día. Siempre recomendaré una reunión presencial a una conversación por chat, pero ante esta situación tan dramática; al menos pero sin contentarnos, la interacción en redes sociales nos permite aminorar la posibilidad de depresión adolescente.
¿Qué tenemos que
hacer?
En niños y
adolescentes, que no hacen un uso ético de la tecnología, los padres son
responsables de orientarlos en el uso adecuado. Aprendamos a darle un uso
consciente de las redes sociales: ¿cuánto tiempo le dedico, para qué, ¿qué
suelo hacer y cómo me siento?, ¿qué entienden sus hijos de las publicaciones de
sus amigos?
Son conversaciones
que deben tener los padres con sus hijos.
Facebook es solo una
parte de la realidad. Las interacciones reales y emocionales son más
importantes que las frías conexiones digitales.
Fuentes:
- https://www.inc.com/peter-economy/in-a-shocking-announcement-facebook-reveals-that-using-facebook-may-be-bad-for-your-mental-health.html
- https://newsroom.fb.com/news/2017/12/hard-questions-is-spending-time-on-social-media-bad-for-us/
- https://www.facebook.com/facebook/videos/10156872538281729/
- https://www.fastcompany.com/3016065/facebook-makes-us-feel-bad-about-ourselves-heres-the-research-that-proves-it
- https://www.economiadigital.es/tecnologia-y-tendencias/facebook-salud-mental-depresion_526082_102.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario